El Canal de Panamá cerró su año fiscal 2020 con un tonelaje anual de 475,1 millones de toneladas del Canal de Panamá (CP/SUAB), gracias en parte al entorno seguro y al servicio ininterrumpido que se mantiene para sus clientes y trabajadores, en medio del impacto global de la pandemia de Covid-19.

"La prioridad del Canal fue asegurar el bienestar de los casi 10.000 hombres y mujeres que conforman nuestro equipo y reafirmaron su compromiso adaptándose a los cambios impuestos por esta pandemia para garantizar el funcionamiento continuo de la vía acuática", dijo el Administrador del Canal de Panamá, Ricaurte Vásquez.

El período fiscal que se extendió del 1 de octubre de 2019 al 30 de septiembre de 2020, pintó dos cuadros diferentes para el Canal de Panamá, con un primer semestre que superó las expectativas, seguido de otro que vio como una pandemia comenzaba a perturbar vidas y economías en todo el mundo.

El punto álgido del impacto de la pandemia en la vía interoceánica se produjo entre mayo y julio. Los tránsitos en el Canal de Panamá disminuyeron en un 20% durante ese período, debido principalmente a la reducción de los cruceros, los car carriers y los tanqueros GNL. Sin embargo, el tránsito y la movilización de carga se normalizaron en agosto y septiembre, los dos últimos meses del año fiscal, lo que permitió que la vía interoceánica cerrara con 475,1 millones de toneladas CP/SUAB.

Como ruta clave en el comercio mundial,lLa actividad en el Canal de Panamá refleja la de la economía global, incluyendo estimaciones de que el mundo puede ver una contracción de alrededor del 5% en 2020 como resultado de la pandemia, con una mayor caída de hasta el 8% en los Estados Unidos, el principal cliente del Canal, basado en las proyecciones del Fondo Monetario Internacional.

En medio de este escenario, el Canal de Panamá terminó su año fiscal con 13, 369 tránsitos, una reducción del 2% en comparación con las proyecciones, mientras que los 475.1 millones de toneladas CP/SUAB representan una caída del 4%, en comparación con las proyecciones. En comparación con el ejercicio económico de 2019, los tránsitos de alto calado se mantuvieron en niveles muy similares y el tonelaje total CP/SUAB aumentó en un 1%.

Servicio continuo y seguro

Aplicadas por el Canal a principios de este año, las medidas relacionadas ante la pandemia ayudaron a preservar el bienestar de la fuerza laboral del Canal y mitigaron la transmisión del virus, contribuyendo a la actividad operativa según los resultados registrados en el año fiscal 20.

En marzo, por ejemplo, la vía interoceánica instituyó procedimientos más estrictos, incluida la reducción del personal in situ a sólo los esenciales para la continuación de las operaciones de tránsito. Del mismo modo, otro grupo de trabajadores del Canal tomó vacaciones, mientras que otro grupo que prestaba apoyo administrativo comenzó a trabajar a distancia.

Comportamiento del mercado

El año fiscal 2020 se caracterizó por la Guerra Comercial entre los Estados Unidos y China, el endurecimiento de las políticas ambientales en la industria marítima y, por supuesto, la pandemia, que sigue afectando a la economía mundial.

Los portacontenedores siguieron siendo el segmento principal en el Canal de Panamá, registrando 166,3 millones de toneladas CP/SUAB o el 35% del tonelaje del año fiscal 20 del Canal, seguido de: graneleros: 80,9 millones de toneladas; tanqueros/quimiqueros: 69,2 millones de toneladas; buques GNL: 46,4 millones de toneladas; buques GLP 44,6 millones de toneladas.

Aunque los resultados de la vía fluvial son similares a los logrados en el año fiscal 2020, marcando sólo un 1% de aumento en las toneladas PC/UMS totales, las expectativas para el año fiscal 20 eran más optimistas, ya que el rendimiento de la vía fluvial en la primera mitad del año estaba por encima de las proyecciones.

No obstante, en marzo de 2020 el impacto de la pandemia comenzó a surtir efecto, afectando al segmento de pasajeros, que debido a las medidas de salud implementadas que terminaron la temporada de cruceros antes de tiempo, cerró un 10% más bajo de lo esperado. Otros segmentos gravemente afectados por las condiciones del mercado debido a la pandemia fueron los car carriers y el GNL, que registraron un tonelaje PC/UMS alrededor de un 21% y un 15% por debajo de las proyecciones, respectivamente.

Los efectos negativos en esos segmentos se vieron parcialmente mitigados por el buen desempeño de los segmentos del gas licuado de petróleo (GLP) y los graneleros, que registraron un tonelaje CP/SUAB superior al previsto en un 27% y un 21%, respectivamente.

El Canal de Panamá también contribuyó a mitigar la incertidumbre económica al ofrecer una serie de medidas de alivio temporales, entre ellas la suspensión de los pagos anticipados de las tasas de reserva de tránsito y otros cambios en el sistema de reserva de la vía interoceánica. Aplicadas el 4 de mayo, las medidas se prorrogaron hasta el 31 de diciembre de 2020, tras un diálogo estrecho y continuo con los clientes de todos los segmentos.

Calado máximo

A finales del año fiscal 2020, y por primera vez en 20 meses, el Canal de Panamá pudo ofrecer a sus clientes un calado de 50 pies, el máximo calado permitido para los buques que transitan por las esclusas Neopanamax. Ese resultado fue posible gracias al uso por el Canal de medidas de conservación del agua, con lo que se optimizaron los recursos hídricos, así como las recientes precipitaciones en la zona de la cuenca.

Como resultado- Aseguraron desde el Canal de Panamá – la vía cuenta ahora con una ruta más competitiva y fiable, contribuyendo a la recuperación económica mundial. Un calado de 50 pies permite a los buques transitar por la vía acuática con más carga, lo que hace más eficiente el transporte de mercancías, beneficiando en última instancia a los clientes del Canal.

Manejo de aguas

Además, al final del año fiscal, el Canal de Panamá publicó una Solicitud de Calificaciones (RFQ) para la precalificación de potenciales oferentes para la ingeniería, diseño y construcción de un nuevo sistema integrado de manejo de aguas. Mediante la inversión en un sólido sistema de gestión de aguas, la vía acuática tiene por objeto reforzar su fiabilidad operacional a largo plazo a medida que sigue adaptándose a los cambios en el comercio mundial, tanto de larga data como provocados por el coronavirus.